
El Alfredo Rubio es el único que lleva barba.
7 de mayo de 2025
A las 12, en el marco de la exposición Peregrinos a Santiago y ermitaños en la Murtra, canto del Regina Caeli ante una imagen de la Pilarica y, a continuación, conversación de Jaume Aymar Ragolta y Albert López Vivancos sobre la orla de la Facultad de Medicina de Barcelona de 1943, restaurada. Transcribimos la introducción:
“Amigues, amics, avui, en aquest 29 aniversari de la pasqua d’Alfred Rubio de Castarlenas, (Barcelona, 12 de juliol de 1919-7 de maig de 1996) ens plau presentar-vos l’orla de la seva promoció de la Facultat de Medicina de Barcelona, restaurada.
La promoció de metges de la Facultat de Medicina de Barcelona de 1943 en la postguerra espanyola i en plena guerra mundial, amb un estol de catedràtics realment extraordinari, amb projecció internacional, ens ajuda a entendre més i millor la figura de l’Alfred. Ell mateix explica: “La medicina me pareció el vehículo mejor para mi actuación en la vida. Estudié con todo esfuerzo. Y con especial pasión algunas materias (…) Pero no me decidí por ninguna especialidad. Me gustaba ser médico de la humilde y maltratada ‘medicina general’. Pedir la colaboración de especialistas, sí, siempre que fuera oportuno, más procurando tener en todo momento una visión de síntesis… ”.


L’exposició de les històries clíniques era aleshores una constant. Alfred va formular el seu pensament, el realisme existencial, mitjançant l’exposició de 22 històries clíniques que tenen totes elles base real. Mai no va renunciar a presentar-se com a metge. Aquesta fou una de les seves vocacions principals. El que passa és que la medicina no donava resposta a la seva vocació profunda. Hi ha una imatge potent que es troba en el llibre “Por qué me hice sacerdote? de l’any 1958: “Ya de estudiante, no en la disección anatòmica (pràctica llena de interès y utilidad) si no en el tránsito de parientes conocidos, la muerte me había impresionado mucho. Ver la cama vacía que la víspera estaba ocupada…Sentir la mano moribunda agarrada a mi bata blanca exigiéndome un auxilio imposible. En la guerra, el atender a un moribundo era una catapulta para la acción inmediata: la propia defensa o acaso la venganza. Aquí nada. Tanto me afectó este morir irremisible, que casi determiné no casarme para no dar vida a seres que tendrían que pasar por el trance de dejar de vivir. Quizás fuera este el mayor gesto de amor a seres que amaría tanto”. Tot i que, després d’ordenat, no va tornar a exercir la medicina, el seu bagatge de coneixements mèdics és imprescindible per conèixer el seu pensament. I d’aquí en podria sorgir, si més no, una tesi. Alfred va conèixer, és clar, tots els seus professors i només alguns dels seus companys perquè havia avançat un curs, però amb algún d’ells tingué vincles d’amistat, com veurem” (…)

12,45. Mesa redonda sobre el libro La cruz, la tiara y la espada. Una historia destrenzada de los papas. Toledo, Ledoria, 2024, que promovió el propio Alfredo en su día, con la ayuda de Jesús García, Lola Cabrera, Gemma Manau y otros. Participaron presencialmente los autores: Montse Rico Góngora, Juan Carlos Losada Málvarez y Jaume Aymar Ragolta. Moderador: Albert López Vivancos.
Estaba a la venta entre otros el libro Folleto para niños con uso de razón y padres en conflicto (Edimurtra, 2006) y las Homilias. Como no llegaron ejemplares de la historia destrenzada, algunos pudieron suscribirse.


13, 15.- Eucaristía en el antiguo refectorio. Presidió en la caridad y predicó Joe, por cierto, muy bien. Oramos por el comienzo del Cónclave y también en sufragio de Ramon Salvans. Al término, en el sepulcro, oramos y recordamos a Juan Miguel y a la familia biológica de Alfredo, su hermana Marina (+) y sus sobrinas Marina y Reyes (ausentes). Repique de campanas.
14, 30.- Comida de hermandad: Amadou Diao (Senegal, murtrano), Jaume, Montse, Agustí, Joe, Antoni, Matías, Santiago, Ousmanne Cámara (Mauritania, murtrano), Beatriz Bertran, Magallanes Espinosa (Cantabria-Santiago de Chile, murtranos).
15.- En la sobremesa, Santiago Montobbio recitó un largo poema que compuso en la Murtra en el año 2018. Obsequió a la biblioteca de la Murtra con un ejemplar de su libro La liberad de la poesía. Ónix editor, Nueva biblioteca íntima, 2025 (720 pp). Marco dirigió un breve coloquio en serio y en broma sobre la familia de Sócrates. Los chilenos cantaron: “Si vas para Chile,” canto típico de aquel país. Montse, a petición de Agustí, entonó la poesía “Murtra, mirto”, compuesto por Alfredo en el claustro, en la Navidad de 1971, convaleciente. (La Casa, los míos… ¡qué cerca y qué lejos!).
Acabamos con unas palabras conclusivas de Albert en el monumento de Fra Ramon Paner y las fotos de rigor.
Asistentes: Joe Socias Bruguera, Santiago Montobbio de Balanzó (poeta, hijo de Juan Manuel Montobbio, abogado, propagandista, amigo de Alfredo Rubio y bien conocido por los mayores), Montse Costa Schilt (logopeda, Badalona), Josep Duran (formado por Paco Andreo, hoy miembro de l’Associació d’Amics de la Murtra y coordinaror del paso del Ecce Homo en la procesión del silencio de Badalona) y su esposa Mercè; María Félix Planas, Antoni Oliva Sala (historiador, gaudinista), Marco Villalobos Valencia (filósofo, doctorando, murtrano), Montserrat Español Dotras, Carmina Poyato, José Luis Fernández Padró, Ita Amigó, Magallanes Espinosa (vicedirector de la residencia de estudiantes en Mt. 1) , Javier Báscones Jeréz (arquitecto, piloto de los miércoles en la Murtra).
Se excusaron: Leticia Soberón, Josep Maria Forcada, Marta Giralt, viuda Salvans, Albert Salvans en nombre propio y de su misión en Sudán del Sur, Maria Jesús Fernández de Pinedo, Luis Rigau, Joaquín Iglesias, Assumpta Sendra, Alejandro Escudero y Teresa Vila, feligreses de la Murtra.
Seguiremos celebrando la pascua de nuestro querido Alfredo en el encuentro virtual internacional del próximo domingo 11 de mayo, festividad de Sant Anastasi, copatrono de Badalona. .