
Releyendo en el evangelio » Jesús glorificó a Dios con su vida y Dios se glorificó en El» vinieron a mi cabeza las imagenes que poco antes había visto en las noticias: Guerra, desolación, hambruna, un apagón eléctrico que nos hizo sentir a todos frágiles, vulnerable….. Y ante este mundo que nos ha tocado vivir y particularmente, en el lugar donde vivo y con las circunstancias que me rodean me pregunté ¿Cómo glorificó yo a Dios en mi vida? y por un momento me sentí triste, hundida, pero vino a mis oídos una conversación que poco antes había tenido con mi hijo y que hacía alusión a una oración de San Francisco de Asis:
¡Señor haz de mi un instrumento de tu Paz!
Que allí donde haya odio ponga yo amor,
donde haya ofensa, ponga yo perdón….
Porque dando es cómo se recibe, olvidando como se encuentra,
perdonando como se es perdonado,
muriendo, cómo se resucita a la vida eterna.
Y ahí, estaba la respuesta a mí pregunta con ese nuevo mandamiento que Jesús en este mismo evangelio después de ser traicionado por Judas nos dice : «Os doy un nuevo mandamiento. Que os améis unos a otros como yo os he amado» .
Pero no es amar de cualquier forma, no, sino siendo capaz de dar la vida por los demás, de amar hasta perdonar a quienes le mataron, amar sin importar las consecuencias, sin mirar nacionalidad ,raza, ideología, sexo, posición social……solo, el ser persona creada por Dios y por ello digna de ser amada . . Glorifiquemos a Dios con nuestra vida , amándonos como El nos amó, considerando al otro como hermano nuestro . En eso verán que somos discípulos de Jesús y que seguimos sus enseñanzas. Porque solo en el Amor podemos glorificar a Dios.